LA IMPORTANCIA DE PLANEAR

He visto cómo empiezas tus tareas sin finalizarlas, cómo tienes pendientes, citas y reuniones sin ejecutar, he notado como sufres de estrés porque sé que a veces pierdes la cabeza, ¿crees que es falta de orden? Ahí tienes la respuesta. Iniciar el día sin saber por dónde empezar es un gran error que cada vez empeora en el transcurso del día, ya que haces lo que debes hacer en modo avión, sin consciencia de lo que se está realizando e incluso sin un rumbo fijo, es ahí cuando existe la necesidad de tener un plan, que nos guíe y nos lleve hacia donde queremos llegar.

La planeación es crear un plan de trabajo mediante el cual se organiza de manera anticipada una situación, evento o acción con el objetivo de hacerlo de la mejor manera posible. Al momento de planear se debe tener en cuenta las tareas con prioridades (las más urgentes por así decirlo), de esta manera al realizar cada actividad la podemos hacer de una manera organizada y cronológica. El planear nos da la ruta, y dirige elementos para que se cumplan objetivos.

Diseñar un plan nos indica el camino correcto que debemos seguir para lograr lo que nos proponemos y está ampliamente relacionado con la programación. Cuando creamos un plan debemos establecer las estrategias a seguir, adaptadas por un periodo de tiempo en los que éstas se deberán llevar a cabo, de este modo tendremos claro lo que hay hacer cada día.

Para la planeación es importante evitar problemas futuros, sabemos que es difícil prever lo que pasará, así que podemos crear planes de contingencia. Este concepto está muy relacionado al tema de control. Lo que nos ayuda es que una vez que tenemos nuestras actividades podemos pensar en los contratiempos o dificultades que se puedan generar al momento de ejecutarlas. Después de revisar el tipo de problemas elegimos procesos que ayuden a acelerar la corrección o incluso a evitar que sucedan.

Por más confuso que sea , debes empezar a construir tu plan respondiendo estas preguntas: ¿qué es lo que haré?, ¿cuándo y cómo?, ¿qué beneficios obtendré?, ¿cualés contratiempos pondré encontrarme en el camino?, cuestionándote es la forma en que podrás crear un buen plan, donde tus objetivos y su proceso estarán claros. No es sencillo, lo sabemos, pero trata de priorizar, organizarte, crea tu rutina, y si ves que lo estas logrando, que has establecido un plan para llegar a tu metas, da todo de ti y mucho más para cumplirlas, avanza hasta que logres todo eso que quieres.

Entonces, de ti depende en gran parte que se hagan realidad eso que tienes en mente, siempre y cuando tengas un buen plan, por eso, he logrado identificar algunos pasos  para realizar un proceso de planificación:

1. Establecer objetivos: El primer paso es identificar cuáles son los objetivos específicos. En esta parte debes incluir una descripción detallada de cada meta, hasta debes detallar las diversas razones o analogía de su selección y cuáles son los resultados esperados cada una de dichas metas.

2. Identificación de los recursos: Cada una de las metas identificadas deben proyectarse financieramente y con el recurso humano para lograr su cumplimiento.

3. Establecer las tareas de objetivos relacionados: Si no quieres colapsar a tu equipo y deseas que realmente las actividades de todos sean eficientes, cada meta debe tener asociadas sus tareas, proyectos y logro bien detallado.

4. Priorizar objetivos y tareas: Se debe priorizar cada metas y tareas para cada objetivo según su importancia. Las tareas que se consideran más importantes deberán ser abordadas y completadas primero. En este proceso de priorización también debes reflejar los pasos necesarios para completar cada una de las tareas para alcanzarlas.

5. Crear actividades y calendario: Crear un calendario donde no solamente se describa cada actividad, sino donde también debamos establecer quien o quienes serán los responsables en su ejecución y cuál es la fecha tope de finalización; esto con el fin de cumplir con los términos generales.